¿Necesitas cambiar una llanta ponchada? Te decimos cómo hacerlo aunque sea tu primera vez.
Cambiar una llanta ponchada es una actividad básica que todos los conductores deben conocer, aunque no todos saben cómo hacerlo.
Si bien es verdad que existen llanteras a domicilio que hacen el trabajo por uno, en ocasiones dependerá solo de nosotros cambiar la llanta.
Ante esto, te explicamos paso a paso cómo puedes cambiar la llanta de tu carro o de alguien más aunque sea por primera vez.
¿Qué necesitas para cambiar una llanta ponchada?
Si necesitas cambiar la llanta ponchada de un automóvil es necesario contar con los siguientes materiales:
- Un gato
- Una llave de ruedas, también conocida como llave de tuercas
- La llanta de repuesto
- Triángulos de seguridad y chaleco reflectante. Aunque no son cosas imprescindibles, sí son muy recomendados.
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¿Cómo cambiar la llanta ponchada?
A continuación te mostramos cómo cambiar una llanta ponchada de manera sencilla, de acuerdo con ChatGPT.
- Asegúrate de estar en un lugar seguro y fuera del camino del tráfico. Activa las luces intermitentes del vehículo para prevenir a otros conductores.
- Coloca el vehículo en una superficie plana, que no este de subida ni bajada y pon el freno de mano.
- Ten listo el gato, la llave de ruedas y la llanta de repuesto. Estos suelen estar en la cajuela del automóvil o en compartimientos especiales.
- Con la llave de ruedas comienza a aflojar ligeramente las tuercas de la llanta ponchada, pero no las quites del todo.
- Lee el manual del vehículo para conocer los puntos de elevación seguros y coloca el gato debajo del chasis, cerca de la llanta dañada.
- Ahora gira la manivela del gato hasta que el auto esté lo suficientemente alto como para que la llanta toque el suelo.
- Posteriormente retira por completo las tuercas y quita la llanta ponchada.
- Coloca la llanta de repuesto en los pernos, vuelve a poner las tuercas y apriétalas a mano.
- Gira la manivela del gato en sentido contrario a como lo hiciste en un inicio para bajar lentamente el vehículo al suelo.
- Utiliza la llave de ruedas para apretar las tuercas tanto como puedas en un patrón de estrella.
- Tras bajar el auto vuelve a apretar las tuercas para asegurarte de que estén bien ajustadas.
- ¡Listo! Ahora solo regresa el gato, la llave de ruedas y la llanta ponchada a su lugar.
No olvides leer el manual de tu automóvil, pues los procedimientos pueden variar dependiendo el modelo y marca del vehículo.
En caso de que te encuentres en una situación de emergencia o cambiar la llanta pueda poner en peligro tu vida o la de otra persona, pide ayuda a un experto.
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