El “calvarius rapidus” fue un dinosaurio de no más de 2 metros.
Un grupo de investigadores ha anunciado el descubrimiento de una nueva especie de dinosaurio en la zona de los Pirineos, ahora denominada "calvarius rapidus".
Los paleontólogos Albert Prieto-Márquez y Albert Sellés, del Instituto Catalán de Paleontología Miquel Crusafont (ICP) y del Museo de la Conca Dellà, respectivamente, son los autores del artículo especializado que describe este hallazgo, el cual ha sido publicado en la revista Journal of Vertebrate Paleontology.
El descubrimiento de esta especie se basa en un hueso del pie que fue encontrado en Pallars Jussà. Se trata de un ornitópodo styracosternan de la Formación Talarn, perteneciente al Cretácico Superior de España.
El fósil encontrado en 2019 corresponde a un hueso metatarsiano del cuarto dedo del pie izquierdo, con una longitud de aproximadamente 15 centímetros. Según las estimaciones, este dinosaurio pudo haber alcanzado una altura de alrededor de 2 metros, lo que lo convierte en uno de los más pequeños de su grupo.
El "calvarius rapidus" sería un herbívoro y se considera uno de los más longevos de su tipo. Está relacionado con los iguanodontes o los hadrosaurios y pertenece al grupo de los estircosternos. Se estima que vivió hace aproximadamente 66 millones de años en Cataluña, durante los últimos años de la era Mesozoica.
Esta especie habría experimentado el impacto del meteorito que ocasionó la extinción de los dinosaurios en la Tierra, lo que le valió el nombre "calvarius", en referencia al calvario que vivió, y "rapidus", que alude a su capacidad de ser una bestia corredora.
Los especialistas destacan que las características morfológicas de esta especie son distintivas y confirman que se trata de una nueva especie de dinosaurio.
Albert Sellés señala además que la estructura interna de los tejidos óseos del fósil indica que se trata de un subadulto tardío al momento de su fallecimiento, lo que proporciona información valiosa sobre el crecimiento y desarrollo de esta especie extinta.
Este descubrimiento enriquece el conocimiento científico sobre los dinosaurios que habitaron la región en el pasado y brinda nuevas perspectivas sobre la diversidad y evolución de estas fascinantes criaturas que alguna vez poblaron nuestro planeta.